miércoles, 23 de agosto de 2023

Moebius.

 En una maleta me caben todos los poemas de mí vida
En una vida me caben los poemas de todos y que no quiso reclamar para si nadie

No sé crea
No soy poeta y si lo fuera tampoco

No bajo diariamente del Olimpo para darle el fuego a ninguna viuda que quiere hacer un guiso.

Tan solo
Todos los días de esta presente vida bajo con una maleta y todos los poemas de mí vida

Si no tiene poema
                            Venga que le regalo este.
Si no tiene vida
                          Venga que le invento una
 Si no tiene maleta
                              Venga con confianza y agarre esta
                              
Que no le falte dónde echar la vida ni lo poemas
Para que no tenga más maleta que sus dos
 manos desnudas

¿Nadie le ha dicho que ambas materias provocan quemaduras al palparlas?

No sé crea 
Uno le agarra el divertimento a las manos con ampollas, al final siempre se revientan las burbujas

Cómo este poema que llega a su muerte prematura 
No sé crea 
Los finales no existen, solo que no hay ojo que mire todo lo que sigue.

Aunque no se crucen más nunca mí mirada o la suya, dude de todo, de mí, de usted y no se crea 
El final de toda cosa es el inició de una nueva.    
      

Infulas de acuerelista austriaco.

 "Creemos ser país y la verdad es que somos apenas paisaje"
Nicanor Parra.


En un país perfecto
En un estado perfecto
No deberían haber poetas
Ni imitadores de la esencia.

Talvez la esencia perfecta de un poeta sea tirar bolas de barro a las ventanas de casa presidencial.

Prefiero
             Creer
                       Esa falacia 

Talvez la escénica sea darle besos al busto de Platón en la mejilla

No sea playón poeta 
Quitese esas infulas de acuarelista austríaco 
No tiemble ni le diga sonetos a la nada
Sea precavido: el vacío puede darle en reflejo la respuesta sabida y menos esperada.

El perfecto poema es el que nunca se escribió
La buena musa la que nunca se tuvo
Y el perfecto poeta es el que se mantuvo callado
Un mudo que
Se quitó las chancletas 
Sacudió el polvo de ella
Y Vivió sin estado ni patria 

En peregne equivocación estuvo en lo correcto, en un país perfecto todo sus habitantes son borregos.

Un balcón para nadie.

 Espero agarrado en la baranda un buen futuro
Veo a los lados y abajo
Veo abajo
Donde vivimos, nunca, solo en sueños acá subimos
Y yo no sé cómo he llegado.

Te espero con las manos callosas, abrazando el frío de un tubo de baranda
Que han de haber inventado otras manos cansadas
Cómo las mías
Cómo las tuyas
Manos rotas de inventar las estructuras y cenas que nunca serán nuestra comida

Te espero subido acá, con la pared a la espalda
Con el hambre viva sintiendo la muerte
¿Sabías?, Hay que estar vivo para poder sentirla
Y hay que estar vivo para que nos roben la vida
De tu muerte o la mía se nutrira solo la tierra.

Mientras no caigas, estarás con vida
Mientras, seguiré esperando en este armazón sin puerta de entrada o de salida
Con las manos callosas abrazando el frío de una baranda
 Cómo robándole pedacitos de respiración al aire
 En este balcón lejano y alto de todos mis sueños
Un balcón para nadie en el que habita un yo que añoro y no conozco.

29 de Agosto

"Quiero saber a dónde ir
Quiero saber a quien seguir
Todo lo que me importa no existe más
Quiero saber por quién morir"

El mato a un policía motorizado - Un segundo plan.


Me aquieto entre el polvo y el ruido de esta oscura ciudad
En constante éxodo miro todo los inexistentes caminos que he inventado surcando con los pies.

Hoy no quiero caminar, quiero mirar el trazo tenue que he dejado.
Que de todo me aleja y me invita a ir a casa

Se que hay una luz que con todo arrasa
Por hoy solamente podría encender las veladoras de estos años, las callejuelas de la oscura ciudad

Hoy no quiero surcar un nuevo tramo, quiero mirar el rastro que he dejado e iluminar los nuevos rumbos que vendrán en parto de verso.

Nunca ha habido un camino más allá que el que dibujamos con nuestros pies e invocamos con nuestra vos y boca
La palabra todo ilumina y desde el cielo todo toca hasta mis pobres plantas, que un constante éxodo la buscan y la quieren hallar.

Veré qué no todo fue bueno y sabiamente descansaré al día séptimo
Cómo un pequeño dios que camina y busca que lo irradie un nuevo sol desde lo alto.

Presunción de enamoramiento.

 Cada oportunidad de enamorarme la había desaprovechado
Ahora me han violentado, llega usted de imprevisto y me toma contra mí voluntad.

Señorita tendremos que ir a juicio:
Me está usted quitando mí derecho a ser un viejo cascarrabias. 

Escopaestesia paranoide

 Siento esa fría mirada
Cómo ave de rapiña
Cómo puñal homicida clavada en mí nuca.

¿Paranoia?
No, no es paranoia
el miedo a lo imaginado, a la conjetura y a todas las lluvias que no se precipitan

En cambio.
Siento la desgracia
La calamidad de cartones y una esquina
El Infortunio de haber nacido entre laderas y jamás leer este poema ni los demás intentos de literatura.

Rondo en compulsivo tránsito mí mazmorra
Siento siempre esa fría mirada
Cómo se achican las paredes anchas
El incensante tintineo de un teléfono transnacional y el grito de un supuesto dios cruel con su rubia cabellera.

Quisiera devolver la mirada a eso que me mira e increpa desde mí espalda hasta la sustancia

La forma en la que sin vos me grita que tendré que pagar cada caricia aunque no esté en contexto de noche sucia, acera rasposa y dudable feminidad.

Cómo gruñe sin garganta, como frunce su ceño sin tener cejas, como mira y oye todo sin ojos ni las infimas orejas.

¿Cómo se enfrenta lo que no tiene cara?
¿Cómo se mira el vacío?

Fácil: 
Mirese a un espejo y entérese 
El abismo siempre se ha mirado por la empañada ventana de un espejo.

Z (zeta)

 Frente a los vasos que se vacian
Entre el porcelanato del suelo y un cieloraso derroido, se esconde la pena
Pena que no se puede tocar pero llena espacios
Como una libra de clavos esparcidos por la cama
Como millones de esquirlas de tiempo que en la sustancia se nos incrustan.
Mientras se nos enfría el alma como café servido a media mañana y el cual nadie bebe ni beberá.

El desorden de un ropero
La alacena llena de sopa instantánea
Parece un nuevo agujero lleno de ramas, podrá ser calido pero jamás como el nido de antaño.

Buscas hogar y terminas alquilando pisos
Comulgando cualquier cristo de ojalata que quieres que te vendan.
Medicación barbiturica mezclada con libros de autoayuda y una magdalena que a turnos trabaja

Te costará mas verla de día, como el sol diario que choca contra tus cortinas nunca abiertas

No le darás la cara a un nuevo día 
No enfrentarás la mañana con un televisor repitiendo noticias
Para tragedias tu vida entera.
La ficción lastimera que distribulles y te cuentas
La paranoia de que cada lengua filosa te partira a la mitad.

Barbie con explosión interna
La fricción jamas el ardor calma
No hay agua que sofoque los incendios internos
No hay lluvia que nos caiga sobre lo arido del alma.